Hasta que un gran día para ella llego una niña de no mas de 6 años y la escucho, y no solo la escucho si no que contesto a su saludo
- ¡Hola!- dijo la niña felizmente
-¡Hola! Menos mal que me después de tanto buscar alguien responde a mi llamada dijo.
- ¿Quién eres pregunto la niña?
- Soy algo que necesita este mundo, algo que necesitan todas las personas, pero los adultos no me suelen hacer caso y los niños para evitar castigos por cosas que han hecho mal tampoco.
- Pero ¿Por qué?- dijo la niña.
- Porque soy la sinceridad, y para la gente adulta es muy difícil ser sinceros, los niños mienten para evitarse castigos, los adultos buscan excusas, todo el mundo miente, yo los llamo y les digo que esta mal, que eso no se debe hacer, pero nadie me hace caso.
- Pues yo no miento-dijo la niña
- Me alegro mucho-contesto- y espero que no lo hagas nunca, porque eso hace que el corazón se haga pequeño, que nadie te crea, que todo sea mas difícil, así que por favor siempre escucha mi llamada, yo te aconsejare- dijo la sinceridad orgullosa de aquella pequeña niña que tenia un corazón limpio.
No hay comentarios:
Publicar un comentario